El costo de la construcción de edificios en Namibia ahora es un desafío

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El costo de la construcción de terrenos y edificios sigue siendo alto, lo que hace que la asequibilidad de una vivienda básica para los segmentos de ingresos medios y bajos sea problemática.

Aunque la economía de Namibia disfrutó de un crecimiento constante superior al 5% durante los últimos cinco años, impulsada por una política fiscal expansiva y el aumento de las inversiones extranjeras directas, se esperaba una desaceleración.

Si bien la economía creció un 5.7 % en 2015, el crecimiento se ralentizará en el futuro, limitado por una desaceleración en la actividad de la construcción, una situación fiscal en deterioro, un entorno político incierto y una desaceleración en los principales socios comerciales, Angola y Sudáfrica.

La disponibilidad de terrenos con servicios sigue siendo un desafío, que también se ha destacado en el Plan de Prosperidad de Harambee bajo los pilares de Progresión Social y Desarrollo de Infraestructura, mediante el cual miles de terrenos con servicios estarán disponibles en todas las ciudades en los próximos años.

El costo de la construcción de terrenos y edificios sigue siendo muy alto, lo que hace que la asequibilidad de una vivienda básica para los segmentos de ingresos medios y bajos sea problemática. Iniciativas del gobierno, en colaboración con el Fondo de Pensiones de Instituciones Gubernamentales (GIPF), para ayudar con la financiación de estos costosos servicios son un ejemplo de su compromiso con este objetivo.

El mercado inmobiliario experimentó un crecimiento mixto, con una disminución de la demanda en el mercado de gama alta con un rango de precios superior a N$2.6 millones, mientras que hay un fuerte crecimiento de precios en los segmentos medio e inferior del mercado. Sin embargo, el crecimiento del volumen en los segmentos medio e inferior siguió siendo bajo debido a los altos costos de los insumos y la prestación del servicio.

Tampoco se debe perder de vista el impacto de la severa sequía que vive el país en la industria de la vivienda, ya que los intentos desesperados por ahorrar agua amenazan con paralizar el sector de la construcción. La espada del control de alquileres y la redistribución de la tierra también pende sobre las cabezas de los promotores inmobiliarios, propietarios y agentes inmobiliarios, ya que el impacto de esto en la industria de la vivienda no está claro actualmente.

Dos nuevas leyes para regular la propiedad inmobiliaria, a saber, la Ley de Agentes Inmobiliarios y Promotores Inmobiliarios, y la Ley de Tierras, todavía están en la agenda para ser discutidas por el parlamento antes de finales de este año.

A pesar de todos los desafíos, Bank Windhoek, una vez más, logró un crecimiento anual aceptable. Parte de este exitoso crecimiento se debió al negocio realizado por nuestro Departamento de Finanzas Inmobiliarias.