La iniciativa de vivienda asequible en Kenia se lanzó en diciembre de 2017. Su objetivo era abordar el déficit de vivienda del país de África Oriental, que actualmente asciende a 200,000 unidades por año. El objetivo era construir y entregar 500,000 unidades de vivienda para diciembre de 2022. Sin embargo, el gobierno entregó menos de 3,000 unidades a través de los proyectos Pangani y Park Road.
Al parecer, el déficit en la entrega de unidades de vivienda asequibles se debe a varios desafíos. Los desafíos surgen principalmente de restricciones financieras. Por lo tanto, para generar fondos, el gobierno está buscando múltiples vías. Estas vías incluyen contribuciones obligatorias al Fondo Nacional de Desarrollo de la Vivienda.
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Este plan se dio a conocer en el Proyecto de Ley de Finanzas de 2023. El gobierno propuso introducir una nueva enmienda en el artículo 31 de la Ley de Empleo. La enmienda recomienda una deducción del 3.0% sobre los salarios básicos mensuales de los empleados del sector público y privado. Esto se complementará con otro 3.0% de sus respectivos empleadores. Sin embargo, la deducción total no debe exceder los 5,000 chelines kenianos.
La contribución se dirigirá al Fondo Nacional de Desarrollo de Vivienda (NHDF). Desde estos últimos facilitarán la implementación de la iniciativa de vivienda asequible en Kenia. Además, la contribución ofrecerá soluciones financieras asequibles para los empleados que califiquen para comprar unidades de vivienda asequibles.
¿Quién será elegible para las unidades de vivienda asequibles en Kenia y qué pasará con la contribución de los contribuyentes no elegibles?
El proyecto de ley proponía que el Secretario del Gabinete de Vivienda y Finanzas formulara nuevas regulaciones para las calificaciones de los miembros elegibles en la iniciativa de vivienda asequible.
Existe una regulación según la cual el estado ejecutará un sistema de lotería cada año para asignar las casas disponibles. Según se informa, este sistema permite una distribución justa y, por lo tanto, evita que los contribuyentes en una posición ventajosa (financiera o influyentemente) adquieran más unidades y tal vez las alquilen.
Los contribuyentes que no son elegibles para las unidades de vivienda asequibles en Kenia esperarán siete años o hasta la jubilación para transferir los fondos a un plan de beneficios de jubilación o un fondo de plan de pensiones. Además, pueden transferir las contribuciones a personas elegibles para viviendas asequibles, sus cónyuges e hijos dependientes. Alternativamente, pueden optar por recibir sus ahorros en efectivo como parte de sus ingresos. Sin embargo, esto estará sujeto a impuestos a las tasas vigentes.
Cabe destacar que las contribuciones también obtendrán una tasa de rendimiento basada en los rendimientos obtenidos por el fondo en las condiciones imperantes de la economía.
Independientemente de lo prometedora que parezca esta enmienda, muchos kenianos la han criticado. Algunos dicen que sobrecargará a los empleados y tendrá efectos adversos en el empleo debido a los desafíos económicos actuales. Otros insisten en que se encuentran en distintas etapas de sus vidas y que sus prioridades difieren, especialmente en lo que respecta a la vivienda.
